La victoria es de Dios
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Predica: La victoria es posible con Dios
Como hijos de Dios viviremos adversidades, oposición y obstáculos en nuestro camino de fe; y ante estas situaciones Dios se hace grande, pues él manifiesta su poder a favor de sus hijos.
Enfrentaremos por ejemplo, pruebas y tentaciones. La Biblia nos enseña según Marcos 1, que cuando el Señor Jesús se bautizó en el Río Jordán, la gloriosa trinidad se hizo evidente, pues nos enseña la Escritura que:
“El Espíritu descendió como paloma”, “la voz del Padre” se escuchó, “el Espíritu Santo llevó a Jesús al desierto”; y hasta los mismos ángeles servían luego al Señor en el desierto cuando fue tentado. Concluimos entonces que en los tiempos difíciles, en el desierto, en la tentación y en las pruebas, Dios está con nosotros para ayudarnos y librarnos del mal.
También lo más seguro es que enfrentaremos persecución y oposición, nos dice Marcos 1:14 “Después que Juan fue encarcelado, Jesús vino a Galilea predicando el evangelio del reino de Dios”.
Como la Biblia nos enseña Juan el bautista había sido encarcelado; los sacerdotes, escribas y fariseos se resistían a la predicación y ministerio del Señor Jesús, sin embargo, Dios respaldaba con gran poder su Palabra y multitudes venían a escuchar al Maestro. Tal vez los enemigos sean muchos y poderosos, pero siempre nuestro Dios será más grande.
Nada ni nadie puede detener los planes de Dios, Marcos 1:15 “Diciendo: El tiempo se ha cumplido, y el reino de Dios se ha acercado; arrepentíos, y creed en el evangelio”.
Al observar al detalle este texto bíblico podemos destacar varias palabras importantes, como: “Tiempo” “Reino” “Arrepentíos” y “Evangelio”. Vemos entonces que el ministerio del Señor Jesús comienza a tener nuevos alcances y un gran impacto, acompañado de milagros y sanidades.
Debemos ser conscientes de los desiertos o dificultades que pueden venir, pero también debemos confiar en el poder y cuidado de Dios para vencer.
Hay muchas cosas por lograr en el nombre del Señor, nuevos milagros por ver, nuevas revelaciones de Dios por conocer, y nuevos niveles de intimidad con el Espíritu Santo. Adelante, persevera, el Señor está contigo.
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